Caracter:

Levante llegó a nosotras mostrando gran temor. Desde el principio, se mostraba bastante bien, aunque se encogía visiblemente ante cualquier movimiento dentro de su box, lo que evidencia un pasado de maltrato. Durante nuestro paseo por la ciudad, se mostró asustadizo en algunos momentos, buscando el contacto cercano. La presencia de gente a distancia no le generaba inquietud, pero le incomodaba la aproximación de grupos, por lo que optamos por evitarlos. También mostraba desconfianza ante la atención directa. Iniciamos el paseo en una zona tranquila y progresivamente subimos hacia un área con más gente y otros perros, donde su comportamiento fue, en general, positivo. Come separado de su compañera, siguiendo la indicación del galguero sobre posibles problemas con la comida. Tanto en el coche como durante las visitas veterinarias, su comportamiento fue impecable. Con sus compañeros se muestra juguetón y disfruta mucho interactuando, aunque a veces puede ser un poco brusco al correr. Ha experimentado una notable mejoría y se muestra muy tranquilo con nosotras, aunque aún presenta sobresaltos ocasionales. Con personas desconocidas, necesita que se agachen al entrar a su patio y le hablen suavemente. Las caricias deben ser delicadas al principio, ya que se asusta con facilidad. La presencia de la «manada» le brinda seguridad. Una vez que confía, se muestra muy cariñoso, llegando a saltar para pedir caricias y restregándose en las piernas buscando atención. En la presentación con un gato acostumbrado a perros, su reacción no fue positiva, por lo que descartamos su convivencia futura con felinos.

Historia:

Levante fue abandonado por su galguero.

Actualidad:

Es un buen perro que merece una familia que le brinde un hogar amoroso y le permita dejar atrás un pasado de servidumbre y trabajo.

Nota para adoptantes: Si quieres adoptar a Levante escríbenos a adopciones.cuencanimal@gmail.com