Esta galguita tan joven es una pasada, un terremoto, es solo: felicidad. Estar con Galena es como un subidón de emociones, ella parece frágil, es delicada, pero su cuerpecito rebosa energía positiva y buen rollo, es muy activa, nerviosa, pero solo por sentirse feliz de estar acompañada y con atenciones. No sabemos que pasará por su cabeza, pero sus movimientos, su mirada, sus cabriolas... solo transmiten alegría! Nos consta que es jovencita, y mantiene esa inocencia que tanto y tanto nos gusta, a veces echamos de menos esto en una protectora, los casos son tristes y los peques necesitan tiempo y confianza, pero Galena, que ha sido un rescate muy extremo, estaba al borde de una de las muestres más crueles: la inanición, rompe la regla, con su actitud y carácter nos deja con la boca abierta, qué ganas de vivir!! A ver, ha necesitado tiempo de adaptarse al refugio, y comprender que este es un hogar donde desarrollarse, poder sentirse segura, le costó y le cuesta conocer a gente nueva, no viene corriendo a saludarte si no te conoce, más bien huye y le faltan sitios para esconderse, pero eso no le pasa con el voluntariado frecuente y con las personas con las que ya a establecido un vinculo, ahí es donde la vemos a gusto y feliz, una delicia. Poco a poco tiene que mejorar con la correa (la acepta sin problemas), sigue bajo supervisión por su lesión (que no le impide hacer vida normal), se deja hacer de todo por las veterinarias... es una cachorrona que ha sufrido demasiado, pero sin grandes traumas que no le permitan desarrollarse con normalidad, necesita su periodo de adaptación y creemos que a partir de ahí será la galguita que estamos teniendo la suerte de conocer y cuidar. Sin ningún ningún problema de relación con sus compañeros, no tanto con las personas desconocidas (les tiene miedo, se aleja y se esconde para vigilar desde la distancia), con las personas voluntarias que la atendemos es muy cariñosa, nos quiere porque sí a todas! De verdad, que Galena es una delicia, con mucha energía... pero una delicia!!
Historia: Desde Cuencanimal conocemos demasiado la realidad de nuestra región y más allá, pero aun así estas cosas nos destrozan día a día, Galena fue uno de los rescates extremos que tuvimos en un pueblo, 4 perritas casi muertas de inanición!, Halia, Vania, Galena y Eileen... qué está pasando!!? Como negar siquiera un mendrugo de pan!? Galena se ha recuperado de su bajo peso en el refugio, pero se rompió una patita y tuvo que ser operada. Lo que ha tenido que pasar esta perrita, abandono, soledad, HAMBRE y SED... y una fractura de su pata, sumado al pesado post operatorio que necesitaba reposo absoluto... Ya le toca disfrutar de la vida, y una familia sería lo ideal!!